La autopista se desliza irreal bajo el manto de lluvia, al otro lado del parabrisas. El volante se escora a la derecha cada vez que las ruedas cortan las acumulaciones de agua sobre el asfalto.
Bajo el runrún monótono del motor, llega el rumor de las respiraciones, tranquilas algunas, otras tartamudean sus inquietudes a golpe de ronquidos sobresaltados.
Amanece.
A través del retrovisor, el conductor observa a los pasajeros; los analiza uno a uno hasta donde le alcanza la claridad creciente.
Es consciente de que sus sueños actuales y realidades futuras dependen de él, tan solo tendría que respirar a fondo y tomar la decisión final.
Liberato© 2016
Foto: Lee Friedlander: Count Basie Band, 1956




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